jueves, abril 13

Freedom isn't free

Hoy, como nunca en mi vida, me siento acompañado. Tengo a los mejores amigos del mundo. Gente que no teme desnudar su alma para darme lo más profundo de sus cicatrices, lo más ignoto de sus corazones, lo más fuerte de sus espíritus.

El disfruta con la alegría de ella, una alegría sin afectación. Le sorprende que una hora y media por semana en compañía de una mujer le baste para sentirse feliz, a él, que antes creía necesitar una esposa, un hogar, un matrimonio. En fin de cuentas, sus necesidades resultan ser muy sencillas, livianas y pasajeras, como las de una mariposa. No hay emociones, o no hay ninguna salvo las más difíciles de adivinar: un bajo continuo de satisfacción, como el runrún del tráfico que arrulla al habitante de la ciudad hasta que se adormece, o como el silencio de la noche para los habitantes del campo.
(J.M. Coetzee, Desgracia)
Ellos me han dado todo, yo sólo espero retribuirlo con cada palabra que salga de mi hormiguear por el infinito universo.

Listener supported: Andy hablando en inglés y Eddie hablando alemán